Ilusiones renovadas, sensaciones encontradas. Un equipo, una afición y un objetivo: Volver a sonreír.
Momento dulce en el universo rojiblanco, un inicio de temporada de ensueño en el que muchos de los factores de los que se dudaba están dándose la vuelta. Desde el banquillo, los técnicos, las incorporaciones, los antiguos y los nuevos, todo parece fluir en una misma dirección, que el sportinguismo vuelva a sonreír.
Cada final de partido, cada arenga, cada «inside» tiene cómo objetivo no sólo motivar a la victoria sino una vez celebrada pensar en la siguiente. Los rostros, los bailes, las emociones de los que juegan y los que no, porque todos son partícipes de la misma gloria, todos suman, desde dentro o desde fuera.
Parece increíble que pocos meses después de terminar una temporada cargada de iras, humillaciones y malos momentos, todo de un vuelco para convertirse en el viaje perfecto, la autopista hacía el cielo.
Afición, equipo, afición, simbiosis que es el secreto del éxito, sumado al buen juego, el sacrificio, la solidaridad con el compañero, el buen hacer desde la dirección del banquillo y un compromiso, batalla sin cesar. Hay que aprovechar este momento, hay que disfrutar de lo ya conseguido sin dejar de mirar al frente. Ya no caben los reproches ni las malas críticas, ahora toca remar en una misma dirección, merecemos ser felices, merecemos disfrutar, merecemos creer e ilusionarnos, merecen que no fallemos.
Puede que un día perdamos, que nos sirva de acicate para revelarnos, puede que un día no salgan las cosas, pues aprendamos de ello, puede que un día sin darnos cuenta estemos celebrando un retorno que parecía imposible hace medio año.
Canto a tu ritmo
Y en pleno mes de enero
Es primavera
Será porque te amo
Si estamos juntos
No se ni donde estamos
Que nos importa
Será porque te amoVuela que vuela y verás
Que no es difícil volar
Vuela que vuela y veré
Al mundo loco de atar
Si canto canto por ti
Por un amor que aparece
Que nace y que crece
Dentro y fuera de mi
No es tan difícil, es una cuestión de Fe, y ¿quién nos gana en eso?. El Sábado cita ineludible en casa, cita en El Templo que se tiene que convertir en el bastión inexpugnable ese reducto de tierra, césped y hormigón inconquistable. Desde aquí en la radio, desde la lejanía de las ondas estaremos al pie del cañón hasta la 42, porque…y ¿si?….
